martes, 1 de noviembre de 2011

Meditando...

Si alguien me pudiera ver ahora pensaría que estoy como una cafetera. Pero como tengo la ventana cerrada a cal y canto, nadie puede ver qué hago además de teclear. Sólo diré que tengo dos ordenadores encendidos y ando usando los dos a la vez. Suficiente como parecer friki chiflada.
El caso es que he pasado algunos días muy nerviosa. Muchos trabajos y cosas para entregar, mucho recopilar información, y mucho tratar de aclararme las ideas.
Así que ando ahora tratando de quitarme de encima agobios variados, y mañana será otro día en el cual empezaré a intentar responder a todas las cosas que tengo pendientes.
Pero hay algunas cosas que quedan pendientes y que no tienen fácil solución. Hay cosas que no se arreglan mandando un mail o haciendo una llamada. Son cuestiones que afectan a la persona, y que uno no sabe si se las imagina o si son reales. Como es fácil suponer hablo de relaciones entre dos personas y no de otra cosa. Y de esas dudas raras que de repente te surgen acerca de a donde puñetas va a conducir esto, y hasta donde puñetas quiero que llegue esto. Me pasa con varias personas, y ando tratando de pensar por donde desembocar cada cosa.
Estudiar tiene sus compensaciones, y es que te permite aplazar las decisiones personales. Pero el tener cierta edad te hace saber que o te andas al loro, o te estallarán cuando menos lo necesites...

2 comentarios:

  1. ¡Leñe!, cuanto misterio...
    Es que pensé que ya te habías librado de coñazos varios, pero si resulta que te los encuentras allá donde vayas, ¡uf!

    ResponderEliminar
  2. :-) Más o menos me considero libre de coñazos. Hay, inevitablemente, algún compañero que le ves que es un coñazo en potencia, pero ya lo ves venir, no le dejas que pase las distancias de seguridad. En cuanto al misterio, es porsiaca me leen, nunca se sabe. De todas formas, esta entrada corresponde más a agobios personales que a otra cosa. Simplemente ando un poco descolocada con todo lo que tengo que hacer. Como mañana voy a pegar tiros, supongo que me quedaré más tranquila... hasta que llegue a casa y vea todo lo que queda pendiente. O bien, que es bastante probable, hoy meteré caña a muchas cosas, para ahorrarme disgustos el domingo a última hora.

    ResponderEliminar